jueves, 3 de diciembre de 2009

Razones con causa


Hay veces en que las palabras sobran, y de verdad sobran!.
Hoy estuve conversando con una amiga en un café, era un buen rato hasta que apareció uno de sus amigos y aunque lo conocía fue un dolor a las muelas.
Percatarse de que uno esta incomodo es como descubrir que pagaste como 30 soles por un huevo frito con 4 panes, es decir, una sorpresa fea, que conforme lo vas comiendo te das cuenta de la gran estafa que te hacen.
Este amigo tenia un tema de conversación sobre que divertido seria que todas las personas en lima tengan una cultura gourmet, es decir que salga de su rutina y empiecen a comer por ejemplo salmón en vez de toyo, o gastarse medio sueldo promedio en un buen restaurant. Lamentablemente no se dio cuenta de la cara larga que teníamos y que el tema era por demas aburrido (por no decir estúpido).

viernes, 20 de noviembre de 2009

Que delicia


De esa cosa no he de comer, interesante afirmacion, aunque una de las mas conocidas es "No me gusta", en realidad son limites que uno pone en su mente teniendo como base el aspecto el aroma y el sabor, cuando uno no ha pronunciado estas palabras habiendo tenido experiencias pasadas que no hicieron mas que generar arcadas y disgustos alimenticios.
Alpaca, Lengua, Foie gras, Viceras, etc.. , en fin muchos nombres que no son sinónimos de aceptación en el paladar, eso es porque no nos imaginamos poner una alpaca en el plato, o ver un hígado entero sangrando en plena mesa, o quizás saltar la cuerda con unos 2 metros de intestino delgado.
Nuestro cerebro no puede aceptar que partes que no tengan un buen aspecto, un buen aroma o un buen sabor están a mas de 5 metros de nosotros en un plato, particularmente quien les escribe, repudiaba el aroma de las viceras o el hígado frito, peor aun, percibir la textura de la guata del estomago de la vaca o un pedazo de la pata del cerdo era sinónimo de vomito inmediato.

martes, 27 de octubre de 2009

Hojaldre de Pincel



Arte, palabra q dificilmente uno podría relacionar a un ambiente de alimentos y mas aun, pintor con cocinero es algo q no van de la mano hoy en día.
Remontemos muchos años atrás y ubiquemonos en Francia, donde todo esto era posible, Claude Gelée nacido en 1600 que se convertiría en un famoso pintor años después, no se imagino si quiera contribuir de la manera en que todas las grandes creaciones culinarias se dieron por esos años; en 1613 el trabajaba para un maestro pastelero, quien le sugirió aplicar su ingenio artístico innato, en la cocina. Su historia, llena de avatares es casi de novela. Su idea nació, como nacen muchas ideas, del azar: su padre enfermo del estomago necesitaba algo blando y suave, y se le ocurrió hacer un pan con mantequilla dentro. Se sorprendió del resultado y siguió practicando. Se dio cuenta de que si sobre una masa ponía la grasa y la doblaba, al cocerse quedaban hojas superpuestas.
Tras ciertos perfeccionamientos, se adopto pronto esta masa en toda Francia y posteriormente, otro pastelero de renombre, el francés Marie Antoine Carême establece el número de dobleces que debe llevar para una adecuada separación de las hojas. También es el creador del vol-au-vent, un pastelillo de hojaldre ahuecado para ser relleno a gusto.
En el hojaldre, al realizarse dicha operación de plegado van quedando finas láminas impermeabilizadas por la grasa empleada. Estas retienen el vapor que se genera con el agua de la masa durante la cocción y se separan como las hojas de un libro.
Hablar de hojaldre (como lo conocemos hoy) hoy en día no esta restringido a solo pastelería, es total el uso que se le da en la gastronomía, aunque esta mas plasmado en nuestras mentes un sabor dulce, aunque los registros mas antiguos de hojaldre van datan en libros romanos y se ha empleado mucho en la cocina árabe, con platos como la bastela (o pastella) que dio origen a la palabra “pastel”, ya que los pasteles tradicionalmente eran siempre de hojaldre.



Obra de Claude Gelée.
Puerto con el embarque de la Reina de Saba (National Gallery de Londres).

sábado, 24 de octubre de 2009

You`ll make it

Tan fácil como comer una galleta es tragarse su orgullo.
Que cuesta mas lograr, elegir una comida o comérsela?, ahora bien que trae mas satisfacción ? cocinar o comer?.
Creo q todos llevamos una galleta interior llamada orgullo, nos cuesta mucho hacerla, nos gusta mantenerla, sabemos q es lo máximo, pero que pasaría si nos la hacen tragar?
Eso me recuerda, de que sirve tener algo tan valioso si no lo sabemos utilizar... de que sirve hacer un postre maravilloso si te lo van hacer tragar.
Como quitarme ese orgullo sin mostrarme como soy?
Por ahí leí, No es tanto que te muestres tal como eres sino mas bien que estés dispuesto a afrontar que los demás "no te acepten".
Humildad es lo que se antepone al orgullo según el diccionario, saber decir, no puedo , no entiendo , me falta mucho, por favor Enseñame !! (eso ningún libro te lo dice)
Tras ver destruido mi orgullo como una galleta aplastada saque mi mensaje de entre los pedazos en el suelo, aprender igualar y superar...
No hay fallas en repostería escuche , es cierto me respondí pero para ello hay q aprender bastante, no lo se todo y cada dia aprendo mas, "cual es la manera correcta" ??, quizás si hubiera tenido esa conclusión en mi mente 5 segundos antes, no hubiera malogrado la Crème brûlée.
En fin , You`ll make it , so you eat it!!!